Se trata de la primera etapa de la depuración civil del agua: los tratamientos primarios (como el desarenado, el desaceitado o la decantación) se encargan de eliminar el componente «grueso» del efluente. Sencillez y fiabilidad son las ventajas que se exigen a estas soluciones, sobre todo teniendo en cuenta que la calidad del agua tratada afectará al funcionamiento de las tecnologías posteriores.
El objetivo del llamado tratamiento primario de aguas residuales es la eliminación del componente «más grueso» del efluente: arenas, aceites y grasas, una gran proporción de sólidos en suspensión de mayor tamaño. Se trata de una fase de depuración que no suele ser autónoma, sino que debe reducir la carga contaminante y facilitar las intervenciones posteriores.
Normalmente, se habla de «tratamiento primario» (y luego secundario y terciario) sólo en el caso de las aguas residuales municipales, es decir, en las depuradoras públicas: en este caso, las normas europeas y nacionales establecen una secuencia muy clara de tratamientos y tecnologías afines para apoyarlos (lo que no siempre ocurre con las aguas residuales industriales).
He aquí una lista de los principales tratamientos primarios.
MITA Water Technologies puede ayudar a los clientes municipales e industriales con dos soluciones en particular para el tratamiento primario de aguas residuales.
Una industria especializada en la limpieza de petroleros debe tratar los aceites de las aguas residuales brutas: los tres desnatadores de aceite suministrados por MITA Water Technologies permiten eliminar eficazmente los aceites, garantizando un agua tratada que cumple los requisitos de calidad. El servicio in situ de MITA también fue muy valorado.
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Sistemas integrados para las distintas fases del tratamiento del agua: ésta es la clave del éxito del suministro a una empresa alimentaria, con la ayuda de una consultora de ingeniería del norte de Italia concienciada con el medio ambiente.
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